El Colegio San Buenaventura Capuchinos de Murcia, ha sido y sigue siendo, uno de los centros pioneros en nuestra Región en la participación y el desarrollo del Programa “Educando en Justicia”, que nació como consecuencia de un acuerdo entre el Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia, en conexión con el Consejo General del Poder Judicial, y la Consejería de Educación de la Comunidad Autónoma murciana.
Nuestro Centro se sumó a este Proyecto desde sus inicios en 2006, por lo que nos sentimos muy orgullosos de estar desarrollándolo 16 años sin interrupción.
“EDUCANDO EN JUSTICIA”
Los principales objetivos de este Proyecto son:
Dos grandes bloques configuran este Programa. En una primera fase se pretende que los escolares tomen contacto con la Justicia. LOS ALUMNOS representan un juicio en el Centro Educativo, al que asiste un Magistrado/a, que al finalizar el mismo, en una charla-coloquio explica y contesta a todas las preguntas que los alumnos le planteen. En una segunda fase de este primer bloque, los alumnos asisten a un juicio de menores en la Ciudad de la Justicia y visitan el Palacio de Justicia de Murcia y sus dependencias.
El segundo bloque, está representado por el “Juez de Paz Educativo”, donde los alumnos aprenden a dialogar y poner solución, a través de esta figura, a los pequeños problemas que entre los propios alumnos puedan surgir. Los jueces de paz educativos, son elegidos entre los alumnos cuyo carisma le haga merecedor y ser capaz, de mediar y conciliar a otros alumnos de manera voluntaria y pacífica los conflictos surgidos entre iguales. Se trata, por tanto, de una medida distinta, pero a la vez complementaria a la sancionadora, en la que se promueven experiencias de justicia restaurativa fundamentada en la reflexión y el daño ocasionado, la reeducación y la prevención. Se favorece el desarrollo de la libertad, el diálogo y el consenso.
La figura del juez de paz educativo promueve la ejemplaridad entre los alumnos pues se implican y colaboran de forma activa en la resolución del conflicto, contribuyendo a crear un ambiente de confianza, favorecedor del aprendizaje. En suma, los jueces de paz, mediante esta iniciativa que promueve el diálogo en la resolución de conflictos, facilitan unas relaciones más armoniosas entre los miembros de la comunidad educativa y se corresponsabilizan en la mejora del clima escolar. Todo ello al amparo de la normativa establecida por la Consejería de Educación.
Desde que iniciamos nuestra participación en el programa hemos intervenido activamente en distintos foros, como jornadas de mediación y conciliación de la Universidad de Murcia, Universidad Católica de Murcia, formación del profesorado a través del CPR de la Consejería de Educación, así como un encuentro con el Colegio “Sagrados Corazones” Capuchinos de Madrid. Todo ello con la finalidad de dar a nuestros alumnos una visión de lo que es la Justicia como pilar fundamental del Estado de Derecho, en conexión con otro pilar para la existencia de una sociedad preparada y dialogante, como es la Educación. Esta simbiosis, imprescindible en toda democracia, se plasma de forma efectiva a través del Programa Educando en Justicia y Juez de Paz Educativo que, aunque en un principio estaba dirigido a los alumnos de tercero y cuarto de la ESO, se ha extendido también a los demás alumnos de la ESO, e incluso de Bachillerato, con la perspectiva de extenderse en los próximos cursos docentes a la Universidad Pública de Murcia.
La finalidad por tanto de este Programa educativo, no es otra que aprender a dialogar sobre las bases de la conciliación: la voluntariedad, la equidad, la flexibilidad, la honestidad, la confidencialidad, la neutralidad y la imparcialidad. Además de transmitir un mensaje claro en tres cuestiones fundamentales para la concordia en las aulas como son, no a la violencia, no a las drogas y no al acoso escolar.
Educar en estos valores, tolerancia y respeto mutuo son las herramientas imprescindibles para lograr una sociedad mejor. Seguiremos Educando en Justicia.
PAZ Y BIEN.